Nota de Prensa l redaccion@laesquina506.com
¿Costa Rica debe o no abrirse a la exploración y eventualmente a la explotación de combustibles fósiles, en particular el gas natural? Con el fin de aportar a una discusión informada sobre este tema, la Alianza Empresarial para el Desarrollo (AED) celebró hoy un diálogo entre cuatro expertos en distintas áreas relevantes al tema.
Alexandra Kissling, presidenta de la AED, recordó que las 100 empresas a las cuales la alianza reúne, creen que las soluciones sociales y económicas deben promover el desarrollo sostenible, el bienestar y la equidad a partir de los valores de Costa Rica, como la paz, riqueza natural y turismo sostenible.
“Lanzamos esta iniciativa porque es un tema difícil, porque puede dividirnos, porque el país puede perder mucho al tomar una decisión equivocada. Debemos examinar los aspectos técnicos, políticos, económicos y ético-filosóficos que están involucrados en una decisión de abrirnos o no a la exploración de combustibles fósiles. El peor escenario para nosotros es la política de los hechos consumados, que sin discusiones ciudadanas francas, abiertas e informadas, se tomen decisiones que cambien el rumbo del desarrollo nacional”, afirmó Kissling.
Durante la conversación, celebrada en el Auditorio del Museo de los Niños, la líder global de cambio climático, Christiana Figueres, y el presidente del consejo directivo de INCAE, Roberto Artavia, sostuvieron la posición de que Costa Rica no debería iniciar exploración de hidrocarburos.
En la contraparte estuvieron la ingeniera química y geóloga Mihaela Dobrinescu y el ingeniero químico Carlos Roldán, quienes defendieron que una potencial producción de hidrocarburos nacionales traería beneficios a Costa Rica.
Datos, proyecciones y argumentos a favor y en contra se presentaron durante las dos horas de diálogo, en el que se confrontó la posibilidad de encontrar recursos naturales catalizadores de desarrollo, con el riesgo de afectar la marca país y principal fuente de ingresos de Costa Rica, históricamente ligada a la protección del ambiente.
Enfoques distintos
Entre las principales diferencias destacó el uso que dieron los panelistas a estudios y proyecciones de la demanda global de hidrocarburos, uno de los elementos clave para la toma de decisiones.
Los informes de la Agencia Internacional de Energía (IEA por sus siglas en inglés) señalan que el consumo de hidrocarburos llegará a su punto más alto en el cierre de la década actual y que en los países industrializados ya comenzó el fenómeno de caída de la demanda. Esto marcaría un proceso de declive de la era del petróleo y a estos argumentos se plegaron Figueres y Artavia.
Por otro lado Dobrinescu y Roldán afirmaron que las cifras de la Agencia ignoran las condiciones reales del mercado y que en estudios recientes de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y de la gigante de hidrocarburos británica British Petroleum (BP), apuntan a una recesión en el consumo de carbón pero prevén un crecimiento constante en el consumo de petróleo y gas natural.
Aunque ambas partes coinciden en que la transición energética (de energía fósil a fuentes renovables) ya está en proceso, otro de los puntos de desencuentro surge de cómo debería sumarse Costa Rica a esta transformación: los promotores de la exploración afirman que las acciones locales son incapaces de mover la aguja global en emisión de gases de efecto invernadero, mientras el sector opositor urge un liderazgo del país en el proceso global de adopción de energías renovables.
En esta diferencia recae el corazón de la discusión: ¿Cuál camino se debe seguir? ¿La expectativa de posible beneficio económico que podría generar la exploración? ¿O convertir al país en un modelo de matriz energética del futuro?
La conversación exploró esta incertidumbre desde distintos enfoques económicos, ambientales y personales. El conversatorio completo se puede consultar en la página de Facebook de AED.
La actividad contó con la moderación del periodista y diplomático Eduardo Ulibarri. “Un gran gusto tener a cuatro personas expertas en la materia dispuestas a debatir con gran fundamento, gran respeto y gran altura, sobre un tema que indudablemente es polémico. Yo espero que esto contribuya no solamente a tomar las mejores decisiones posibles en materia energética, sino también a mejorar el nivel de debate público en Costa Rica, que es una democracia que merece tener un debate público de calidad” indicó Ulibarri como su valoración general del espacio.
Este diálogo es una iniciativa de AED, en asocio con el diario La República.