Detectar y manejar el trastorno bipolar: Claves para una vida equilibrada

Mar 27, 2024 | Noticias

Comunicado de Prensa l redaccion@laesquina506.com

El trastorno bipolar, una condición mental que trae consigo fluctuaciones extremas en el estado de ánimo, puede pasar desapercibido o ser malinterpretado, por ello, comprender sus signos y síntomas es crucial para un manejo efectivo y una vida plena de quien lo padece y personas cercanas. 

Los síntomas del trastorno bipolar varían según el tipo y la gravedad del episodio. La manía se caracteriza por euforia, irritabilidad, energía excesiva, impulsividad y grandiosidad. La depresión, por otro lado, se asocia con tristeza, desánimo, pérdida de interés en actividades, fatiga y pensamientos suicidas.

Yessenia Arce, psicóloga y docente de la Universidad San Marcos, señala que es fundamental diferenciar los episodios maníacos y depresivos de los cambios de humor comunes. “Los episodios bipolares son más intensos y duraderos, interfiriendo con la capacidad de la persona para funcionar en la vida diaria” explicó la experta.

El trastorno bipolar se clasifica en dos tipos principales: bipolar I y bipolar II. El primero, se caracteriza por episodios maníacos que duran al menos una semana, o episodios mixtos que incluyen síntomas maníacos y depresivos al mismo tiempo; mientras que, en el segundo, se determina por episodios hipomaníacos (menos severos que la manía) y episodios depresivos.

Importancia de la detección temprana y el tratamiento

La detección temprana del trastorno bipolar es crucial para un tratamiento efectivo. Reconocer los signos de advertencia y establecer patrones en los episodios bipolares puede ayudar a prevenir la intensificación de los síntomas.

El diagnóstico del trastorno bipolar lo realiza un profesional de la salud mental, como un psiquiatra o un psicólogo. El proceso implica una evaluación exhaustiva que incluye:

  • Anamnesis: Recopilación de información sobre la historia médica y familiar del paciente, así como sus síntomas y experiencias.
  • Exploración física y psicológica: Evaluación del estado físico y mental del paciente.
  • Pruebas complementarias: Descartar otras condiciones que puedan causar síntomas similares.

Por su parte, el tratamiento del trastorno bipolar generalmente incluye una combinación de terapia cognitivo-conductual, junto con otras formas de terapia, que pueden ayudar a identificar desencadenantes y desarrollar estrategias para controlar los síntomas. Además, los medicamentos estabilizadores del estado de ánimo, antidepresivos y antipsicóticos pueden ser necesarios para controlar los episodios maníacos, depresivos y de ansiedad.

Impacto en la vida cotidiana

El trastorno bipolar puede afectar significativamente la calidad de vida de quienes lo padecen y de sus seres queridos. Además, la desinformación y los mitos pueden afectar la convivencia familiar.

Arce señala que las personas con trastorno bipolar pueden incorporar en su vida diaria prácticas de autocuidado como dormir bien, llevar una dieta saludable y hacer ejercicio regularmente, asimismo, para el manejo del estrés es importante investigar y poner en práctica técnicas de relajación, meditación y mindfulness.

Otra solución es buscar apoyo emocional con los amigos, familiares, grupos de apoyo y profesionales de la salud mental.

La psicóloga también resalta como crucial crear un ambiente de apoyo y comprensión en la vida cotidiana de quienes viven con trastorno bipolar, esto se logra a través de: la comunicación abierta y honesta, el establecimiento de rutinas y límites, el fomento del autocuidado y la responsabilidad, y el trabajo interdisciplinario entre profesionales, pacientes y familias.

“El conocimiento del trastorno bipolar y su manejo efectivo son fundamentales para una vida equilibrada y productiva. Con el apoyo adecuado, las personas con esta condición pueden vivir plenamente y gestionar eficazmente sus síntomas, construyendo relaciones sólidas y significativas en el camino” concluyó Arce.