Más de 668 mil personas beneficiadas en la región con una inversión sostenida y alianzas que reflejan cómo juntos alimentamos el futuro.

San José, junio 2025. En Cargill, hablar de sostenibilidad es hablar de impactar positivamente a las personas. Es ayudar en los agricultores que trabajan la tierra con esperanza, en las niñas y niños que reciben un plato de comida nutritiva en su escuela, en las mujeres emprendedoras que hacen crecer sus negocios y en los colaboradores que, con pasión, dedican su tiempo a mejorar su entorno y ayudar a las comunidades. Esa es la esencia de Convivencia 2024, el informe más reciente de Responsabilidad Social Empresarial (RSE) de Cargill en Centroamérica, que refleja el impacto positivo de sus acciones en Costa Rica, Guatemala, Honduras y Nicaragua.
Durante el último año, más de 668 mil personas fueron beneficiadas por los programas sociales de la compañía. Este alcance es producto del trabajo conjunto con aliados estratégicos y el involucramiento activo de sus empleados: cerca del 80 % de los colaboradores en la región participaron en actividades de voluntariado. Desde escuelas y comunidades rurales hasta centros de producción agrícola, Cargill ha estado presente en distintos espacios de la región.
Convivencia 2024 no solo muestra resultados, sino relaciones. Más de 4.7 millones de dólares fueron invertidos en proyectos sociales que hoy se traducen en acceso a alimentos, oportunidades económicas, bienestar animal y herramientas para adaptarse a los desafíos del entorno. Todo esto responde al propósito de Cargill: nutrir al mundo de manera segura, responsable y sostenible, priorizando siempre a las personas y las comunidades en las que opera.
Los programas permanentes son el corazón de esa estrategia. Nutriendo el Futuro, en alianza con CARE, ha fortalecido la seguridad alimentaria de familias mediante capacitaciones, huertos escolares y entrega de capital semilla. A través del programa Resiliencia de Medios de Vida, se ha logrado conectar a pequeños productores con los comedores escolares, creando ingresos sostenibles y acceso a productos frescos para miles de estudiantes. Con Comunidades Sostenibles, en conjunto con Glasswing, se han promovido iniciativas educativas, huertos comunitarios y formación en nutrición. Y con Dejando Huella, el enfoque ha ido más allá de las personas, generando conciencia sobre el bienestar de más de un millón de mascotas y animales atendidos.
“La sostenibilidad no es solo un objetivo, es una forma de actuar que refleja nuestro propósito y compromiso con las generaciones presentes y futuras. Entendemos que cada comunidad con la que trabajamos es parte esencial de ese camino. Por eso, llevamos más de cincuenta años en la región construyendo relaciones duraderas, impulsando iniciativas que generan bienestar, acceso a oportunidades y seguridad alimentaria. Lo hacemos desde la convicción de que el desarrollo sostenible no se logra en solitario, sino en alianza, escuchando y creciendo junto a quienes confían en nosotros”, afirmó Xavier Vargas, presidente de Cargill Food Latinoamérica.
Los éxitos alcanzados en Costa Rica
En Costa Rica, ese compromiso se ha materializado en historias como la de cientos de estudiantes que hoy aprenden sobre el uso responsable del agua de una forma distinta, a partir de iniciativas implementadas en centros educativos públicos del país. Con el proyecto Educando Gota a Gota, desarrollado junto con el AyA y la Fundación Aliarse, los centros escolares integraron videojuegos, materiales lúdicos y mejoras de infraestructura que permiten enseñar sostenibilidad desde las primeras etapas de la vida.
A la par de estos esfuerzos educativos, también se ha fortalecido el emprendimiento local. Juan José, concesionario de marcas Cargill desde hace más de dos décadas, recibió apoyo a través del programa Prosperando con Nuestros Clientes para reorganizar su operación, definir nuevos objetivos y lograr un crecimiento en sus ventas. Como él, más de 140 mipymes en Costa Rica han sido fortalecidas, con formación práctica, herramientas de gestión y asesoría directa.
“Detrás de cada programa hay personas, historias y decisiones que reflejan un compromiso auténtico con las comunidades. Hacer lo correcto implica crear oportunidades reales, generar bienestar y crecer de forma conjunta. Convivencia es la expresión de ese esfuerzo compartido y nos inspira a seguir construyendo valor donde estamos presentes”, expresó Vargas.
Las cifras refuerzan ese compromiso sostenido con el país. En el último periodo, se beneficiaron más de 4.400 escolares, se sirvieron más de 41 mil platos de alimento y se donaron 43 toneladas de producto. Estos resultados evidencian el impacto tangible de una colaboración constante, orientada a generar desarrollo local mediante soluciones concretas y sostenibles.
Convivencia 2024 es más que un informe. Representa el compromiso continuo de Cargill con el crecimiento, la inversión social y la prosperidad compartida. Una forma de honrar el trabajo conjunto que permite alimentar el presente y construir un futuro más resiliente y sostenible.
Para conocer más sobre las historias y resultados del informe, puede acceder al siguiente enlace: https://convivencia2024-cargill.com