De acuerdo con las estimaciones de Global Health Expenditure Database de la Organización Mundial de la Salud (OMS), la prevalencia de sobrepeso u obesidad del país sería de un 94% para el 2060, ubicando a Costa Rica como el tercer país del mundo con sobrepeso y obesidad. Los seres humanos son seres integrales y las decisiones o hábitos hablan de su mundo interior así como los valores, por eso, cuando se trata de bajar o subir de peso, vemos el proceso influenciado por emociones como la tristeza, depresión, miedo, ansiedad, frustración.
Según datos de la OMS, el sobrepeso no solo afecta la salud física de las personas, sino también la forma en cómo se perciben así mismas, por la colocación de etiquetas falsas e incluso, a pesar de luchas, el estereotipo de belleza en la sociedad actual está basado en la delgadez.
En la sociedad actual, aún está sobrevalorado un cuerpo delgado a pesar de que han venido cambiando los estereotipos de belleza. Por ello, se crean barreras entre lo que queremos y obtenemos, debido a que nuestro cuerpo somatiza emociones en grasa, cubriéndonos del exterior, la crítica, el rechazo y más. Lejos de ser la grasa una enemiga, su función es la de protegernos y hasta que la resignifiquemos, esta no se irá.
Karla Vargas de la academia de Programación Neurolingüistica Full Mind, explica que la mayoría de programas para bajar de peso, no le toman valor suficiente a la relación mente-cuerpo y es ahí donde fallan porque ambos están relacionados por completo y ninguno trabaja desvinculado del otro, por lo cual, hay que prepararse primero mentalmente para tomar acciones acertadas de forma física y ejecutarlas. Sin embargo, el peso que más pesa muchas veces no es el que indica la báscula sino el de nuestros pensamientos y emociones, por esa razón, cuando cambiamos mentalidad es cuando cambiamos nuestra vida.
Las dietas restrictivas son dañinas para todos los procesos, ya que producen el efecto contrario en nuestro cuerpo, y afectan también la manera en la que nos relacionamos con la comida. “Si se aprende a amar el proceso, nunca vamos abandonarlo, pero si nos sometemos a cambios poco asertivos de la noche a la mañana, vamos a terminar por boicotear nuestro proceso. Además, debemos hacer un balance de valores y entender que nos mueve realmente en la vida, a que le damos un mayor precio y con que realmente podemos comprometernos”, comentó Vargas.
Según la experta en programación neurolingüística los hábitos incluyen y bloquean nuestra mente, para no lograr hacer un cambio en nuestra vida. Por ejemplo, el dejar todo para después, es la acción base de los resultados negativos. También, el falso merecimiento que nos lleva a pensar que todo lo debemos celebrar.
“Por último, se dice que somos el resultado de las cinco personas con las que más convivimos, por lo que estar rodeado de personas que tienen malos hábitos, conllevará a que nosotros también lo tengamos. Es importante resignificar el sentido de peso y gordura, ya que lo más importante es ser una persona saludable.” agrega.
Recomendaciones para cambiar los malos hábitos mentales
Vargas nos brinda seis recomendaciones para cambiar reprogramar nuestra mente y así poder tener mejores resultados en los objetivos que nos planteamos:
Primero definir en nuestra mente cómo me voy a ver y sentir, qué me van a decir las personas cuando me vean en mi peso ideal, qué me diría a mí misma. Esto debe hacerse todas las noches y todas las mañanas, para que haya una guía poderosa en nuestra mente.
Hidratarse correctamente, ya que en ocasiones el cuerpo lo que necesita es hidratarse y no comida.
Aprender a comer conscientemente, qué le hace mejor a mi cuerpo, qué le va a dar más energía.
Encontrar el ejercicio que más conecte con mi niño interior para un mayor disfrute desde el gozo.
Es importante resignificar el sentido de peso, ya que lo más importante es ser una persona saludable.
Conocerme aún más, evaluando cada una de las áreas de mi vida porque esto es un proceso integral en escala de valores para que empecemos a cambiar rutinas, decisiones y hábitos que me conduzcan a una vida más saludable.
La celiaquía es una enfermedad autoinmune crónica que afecta al intestino delgado cuando se consume gluten, una proteína que se encuentra en el trigo, la cebada y el centeno. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), se estima que alrededor del 1% de la población mundial padece celiaquía.
Para atender este padecimiento, los expertos recomiendan seguir algunos consejos como aprender a leer las etiquetas de los alimentos, asegurarse de que los utensilios de cocina no se utilicen con alimentos con gluten y buscar la ayuda de un nutricionista especializado en celiaquía.
Para aquellos que necesitan sustituir los alimentos con gluten en su dieta, existen varias opciones saludables. La Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) recomienda reemplazar el trigo, la cebada y el centeno por alimentos como arroz, maíz, quinoa, papas, legumbres, frutas, verduras y carnes magras.
Pero este proceso, que podría verse restrictivo al tener que eliminar muchos alimentos de la dieta diaria, no es del todo malo. Podemos encontrar cinco ventajas de no consumir productos con gluten. En primer lugar, ayuda a mejorar la digestión y a aliviar los síntomas gastrointestinales. En segundo lugar, puede ayudar a reducir la inflamación en el cuerpo. En tercero, puede contribuir a mejorar el estado de ánimo y reducir los niveles de ansiedad. En cuarto lugar, puede ayudar a mejorar el rendimiento físico y mental. Finalmente, puede ayudar a reducir el riesgo de enfermedades crónicas como la diabetes, enfermedades cardíacas y algunos tipos de cáncer.
¿Cómo identificar los productos sin gluten?
Leer las etiquetas de los productos es importante para cualquier persona que quiera asegurarse de que lo que está consumiendo es seguro y saludable para su cuerpo. Si se trata de productos libres de gluten, hay ciertas recomendaciones y acciones que deben tomarse para leer correctamente las etiquetas.
A continuación, algunas recomendaciones para leer correctamente una etiqueta de un producto y saber si es libre de gluten:
Busque la lista de ingredientes: La lista de ingredientes se encuentra generalmente en la parte posterior o lateral del envase. Asegúrese de buscar cualquier ingrediente que contenga trigo, cebada, centeno, avena u otros ingredientes que contengan gluten.
Busque la mención «libre de gluten»: Muchos productos que son libres de gluten tendrán esta mención en la etiqueta.
Verifique la certificación sin gluten: Muchas organizaciones ofrecen certificaciones que validan que el producto es libre de esta proteína.
Evite productos con la mención «trazas de gluten». Aunque la cantidad de gluten es muy pequeña, aún puede causar problemas a personas con intolerancia al gluten.
Siguiendo estos pasos, una persona puede leer correctamente una etiqueta de un producto y conocer si es libre de gluten o no. Es importante recordar que leer las etiquetas es una práctica importante para cualquier persona que quiera llevar una alimentación saludable y segura.
Cada vez más la industria alimentaria avanza en el desarrollo de opciones para llevar una dieta libre de gluten. Ejemplo de esto es Nestlé, que en línea con su propósito de desarrollar todo el poder de la alimentación para mejorar la calidad de vida, actualmente dentro de su portafolio en el país ofrece un cereal libre de gluten y, recientemente, una versión de la tradicional Sopa de Pollo con fideos MAGGI libre de gluten.
La Sopa de Pollo con fideos MAGGI libre gluten incluye fideos hechos de arroz. Su proceso de fabricación cuenta con la certificación libre de gluten de la Asociación de Sociedades Celiácas Europea, reconocida organización que valida todo el proceso en el campo y la fábrica para otorgar la certificación y asegurar la salud del consumidor.
A partir del pasado mes de abril, los sancarleños tendrán un nuevo vecino, se trata del Hospital Metropolitano que llegó para ocuparse de la salud de esta población. Los cerca de 200 mil habitantes de este cantón alajuelense, ya no tienen que viajar para encontrar atención especializada, pues, el centro médico además de Medicina General ofrece una gama amplia y variada oferta de servicios.
Neurología y Neurocirugía, Vascular Periférico, Oncología, Cirugía Plástica, Pediatría, Psicología, Medicina Interna, Cardiología, Cirugía General, Geriatría, Ginecología, Urología, Ortopedia, Gastroenterología, Otorrinolaringología, Oftalmología, Psiquiatría y Terapia Respiratoria, son las especialidades que se ofrecerán en esta nueva sede.
Asimismo, los usuarios tienen en un mismo lugar los servicios de Farmacia La Botica, Centro de Nutrición Clínica, Urgencias, Endoscopía, Fisioterapia, Audiometría, Consulta Externa, Laboratorios Clínicos, Odontología general y especializada con Drs. Dent e Imágenes Médicas (ultrasonido, mamografía, desintometría, TAC, rayos X). Además, muy pronto se contará con Hospitalización y Quirófanos.
Con motivo de la apertura, en este momento hay descuentos en todos los servicios y paquetes promocionales en chequeos preventivos y de salud. Adicionalmente, la propuesta hospitalaria integra los múltiples beneficios del plan de medicina prepagada MediSmart, con el cual las personas pueden acceder a beneficios de hasta un 80% de ahorro en diferentes especialidades médicas. También, quienes se afilien a Medismart antes del 1 de mayo en Expo San Carlos se les ofrecerá un 25% de descuento en el plan. Adicionalmente a quienes se afilien por 6 meses o 1 año, se les otorgará un chequeo de cortesía.
Hospital Metropolitano se ubica en el Centro Comercial El Encuentro en Ciudad Quesada, sitio que concentra una gran variedad de comercio, servicios y entretenimiento a la población. Por experiencia, se busca ser parte de estos proyectos, lo que representa un concepto innovador que ofrece una gama de servicios en un mismo lugar.
“Somos el grupo de salud de mayor crecimiento en el país, nuestro propósito es llevar la mejor medicina al alcance de los costarricenses, lograr su bienestar a través de un sistema de salud integral, enfocado en la prevención y el tratamiento médico, bajo los más altos principios de ética, empatía y excelencia”, dijo Mónica Nagel, directora de Relaciones Corporativas.
“Son casi 13 años al servicio de los usuarios, ofreciendo una calidad superior de servicios médicos para toda la familia, con un precio asequible. Hemos trabajado mucho en invertir en innovación y tecnología, con el principal objetivo de poner a disposición de las costarricenses, medicina privada de la más alta calidad, con equipos de última generación y todo lo necesario para la prevención y el adecuado abordaje de distintas enfermedades”, comentó Andrés Wiernik”, director general de Hospital Metropolitano.
Más de 100 funcionarios atienden a los sancarleños, 46 de ellos son especialistas que brindan servicios. El servicio de centro de atención telefónica está a disposición de todos los ciudadanos para consultas, agendar citas o guía de sus necesidades, también se cuenta con información, asesoría y servicios en sitio, redes sociales y página web.
Hospital Metropolitano pertenece a la División Salud de Grupo Montecristo que también cuenta con marcas asociadas como MediSmart, Laboratorios Páez, Farmacias La Botica y Drs. Dent, SAAT, Centro de Nutrición Clínica y PediaClinic.
Este centro médico abrió sus puertas en febrero del año 2010, con el objetivo de brindar una opción médica privada segura, de calidad y que fuera accesible e innovadora. Desde entonces, se ha destacado por su constante crecimiento, cumpliendo con la promesa de brindar a la población accesibilidad a medicina privada de alta calidad, en distintas zonas del país.
Como parte de sus servicios diferenciados, cuenta con centros de excelencia para el abordaje integral de distintos padecimientos. Entre ellos, se destacan el Centro de Cáncer y Hematología, Centro de Excelencia Cardiovascular, Centro de Excelencia Pérdida de Peso y la Clínica de Salud Mental Herrera Amighetti, entre otros.
Además del centro médico en San Carlos, el Hospital Metropolitano cuenta con sedes en Plaza del Sol en Curridabat, San José centro, Lindora en Santa Ana, Marina Pez Vela en Quepos, Huacas en Santa Cruz de Guanacaste, Plaza Lincoln en Moravia, 25 Julio y Plaza Millenium en Liberia y Vizcaya en Heredia.
Una adecuada salud bucodental empieza desde los 6 meses de edad, cuando inicia la erupción de los primeros dientes, sin embargo en cada niño es distinto, siendo lo recomendable antes del primer año y con revisiones periódicas cada 6 meses.
La poca o mala higiene bucal trae consigo distintas enfermedades dentales, como las caries, halitosis y gingivitis. La acumulación de placa bacteriana en los dientes y las encías es la principal causa de estas enfermedades y el consumo de azúcar.
Uno de los errores más comunes que comete la población y la más preocupante es el desconocimiento de la primera molar permanente que erupciona a los 6 años, el problema es que los papás del niño lo tienden a confundir con un diente temporal y eso hace que por el descuido en la higiene bucal se puedan provocar caries que afectarán un diente que es para toda la vida.
Son estas razones por las que la visita al especialista desde tempranas edades y con cierta regularidad es fundamental. La especialista en Odontopediatría, la Dra. Melissa Rojas recomienda algunos hábitos indispensables en los niños como:
Cepillar los dientes del niño al menos dos veces al día con pasta dental que contenga mínimo 1000 ppm de flúor y supervisados por un adulto; en los menores de 10 años los padres deben cepillar o realizar un repaso al final.
Usar hilo dental diariamente una vez al día para limpiar entre los dientes y debajo de la línea de las encías. El tipo de hilo depende de la destreza del adulto y el niño. Se recomienda los flossers de plástico que son más sencillos de manipular.
Una alimentación equilibrada y limitar el consumo de alimentos con azúcar añadida y en niños menores de 2 años eliminado del todo, es parte de lo que ayudará a prevenir las caries. Esto incluye galletas, jugos, colados, cereales, leche con chocolate, sirope, formulas, entre otros.
El uso del biberón es lo más común en los niños, sin embargo el amamantar es lo más recomendable hasta los 2 años de edad, también el uso de vasito es una opción viable. No permita que los niños se queden dormidos con el biberón con líquidos azucarados incluyendo la fórmula es de los retos más grandes para los padres.
Las visitas regulares al odontopediatra para controles regulares previene problemas dentales. El control periódico resulta ser más económico y los niños disfrutan más las citas cuando son por prevención. El acostumbrarlos al dentista pediátrico desde edades tempranas hace que lo vean como algo normal evitando traumas a futuro.
La Dra. Melissa Rojas, odontopediatra explica que algunos problemas dentales que sufren los adultos pueden ser el resultado de una incorrecta salud bucodental desde la infancia, como caries dentales, enfermedad periodontal y problemas de mordida. “La prevención y el tratamiento temprano puede prevenir su progresión”.
La educación en cuanto a la higiene en niños es una tarea y responsabilidad directamente de los padres, es por esta razón, que es fundamental que se siga promoviendo campañas de concientización, programas de atención dental preventiva y promoción de la salud y se vincule interdisciplinariamente con médicos generales, pediatras, nutricionistas, terapeutas de lenguaje y otras especialidades que tiene contacto directo con la población infantil.
Para Rojas, aún hay mucho por hacer para mejorar la cultura de salud bucodental en el país y lograr que la población adopte hábitos adecuados desde una edad temprana y en todas las regiones del país ya que existe una gran brecha de información entre las diferentes zonas.
Según indicó la Organización Panamericana de la Salud (OPS) en 2017, el cáncer de cuello uterino es el segundo cáncer más frecuente entre las mujeres de América Latina y el Caribe, y el cuarto en la región de las Américas, provocando la defunción de unas 35.000 mujeres cada año y un estimado de 83.000 mujeres diagnosticadas anualmente. De acuerdo con las estadísticas del Observatorio Global de Cáncer (Globocan)en 2020 se presentaron en Costa Rica 367 nuevos casos y se produjeron 192 fallecimientos debido al cáncer de cérvix.
Frente a esta realidad, y en el marco del Día Mundial de la Prevención del Cáncer del Cuello Uterino es importante recordar que el cáncer de cuello uterino es una de las enfermedades preveniblesa través de la vacunación, lo que hace necesario hacer un llamado de conciencia sobre esta enfermedad,que puede tratarse con bajos riesgos mientras su detección sea oportuna y temprana.
Un diagnóstico oportuno puede salvar vidas
Con frecuencia, el cáncer de cuello uterino puede prevenirse con pruebas de detección regulares para diagnosticar cualquier lesión, así como con la vacuna contra el Virus de Papiloma Humano (VPH). Las pruebas y los procedimientos a continuación pueden usarse para la detección del cáncer de cuello uterino:
Prueba de VPH: Se realiza en una muestra de células extraídas del cuello uterino de la mujer. Esta muestra se analiza para detectar las cepas de VPH que se relacionan más frecuentemente con el cáncer de cuello uterino. La prueba de VPH puede realizarse individualmente o combinada con una prueba de Papanicolaou.
Prueba de Papanicolaou: La prueba de Papanicolaou es la que se usa con más frecuencia para detectar los cambios tempranos en las células que pueden derivar en cáncer de cuello uterino. Esta también se llama citología vaginal. Para ella se debe obtener una muestra de células del cuello uterino. Con frecuencia se realiza al mismo tiempo que una exploración ginecológica bimanual como parte de un control ginecológico.
La detección del cáncer de cuello uterino se puede realizar durante una cita con un médico de atención primaria o un ginecólogo.
Vacunación como una alternativa de prevención
Una manera de prevenir el VPH es vacunarse. La vacuna para prevenir las infecciones por el virus del papiloma humano (VPH) presenta un perfil de seguridad y actividad comprobados en diferentes estudios clínicos. Por esta razón, la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda vacunar a las niñas de 9 a 14 años. La vacuna contra el VPH se centra en los tipos de VPH que más comúnmente causan cáncer de cuello uterino y que pueden causar algunos de los cánceres de vulva, vagina y ano.
“El cáncer de cuello uterino puede ser prevenible a través de la vacunación temprana. En Costa Rica la vacuna está disponible a través del Programa Ampliado de Inmunizaciones (PAI) para niñas de 10 años y es una herramienta fundamental para proteger a nuestros hijos de esta y otras enfermedades asociadas al VPH”, comentó la Dra. Carmela Oranges, Directora Ejecutiva de Medical Affairs para MSD
Consulte a su especialista médico y proteja a sus hijos contra el Virus del Papiloma Humano.
13 de abril de 2023. La Economía de la Salud en países como Costa Rica, Guatemala, Panamá y República Dominicana, es más fuerte que en otros países de Latinoamérica e impacta positivamente la situación socioeconómica de los países y de las personas. Así lo demuestran los estudios realizados por la Federación Centroamericana y del Caribe de Laboratorios Farmacéuticos (Fedefarma), en el que evidencian la contribución significativa al Producto Interno Bruto (PIB) y a la generación de empleo que genera el sector salud, lo que le convierte en parte esencial de la productividad y desarrollo económico de los países de la región.
Como parte de los proyectos que promueven la sostenibilidad de los sistemas de salud de la región, Fedefarma realizó en conjunto con las empresas Sanigest International y WifOR Institute, dos estudios que exponen la realidad de estos países y abordan tres temas relevantes: el estado de la economía de la salud, la inversión en salud, y la gestión presupuestaria en los sistemas de salud.
Una de las principales conclusiones arrojadas por los estudios, radica en que la inversión en salud impacta directamente en la economía de los países y que, actualmente, los porcentajes de inversión asignados y las prácticas de gestión presupuestaria aún necesitan de un esfuerzo colaborativo para llegar a su máxima eficiencia. Para cambiar esto, el primer paso es hacer visibles las diferencias y estimular la toma de decisiones, que pongan en marcha acciones y estrategias destinadas a invertir más y ser más eficientes en el uso de los recursos.
Para Fedefarma, estos resultados no son novedad, ya que siempre ha trabajado por promover sistemas de salud eficientes en la región, a través del uso óptimo de los recursos asignados al sector de salud pública, con el fin de que la población tenga acceso a servicios innovadores y de calidad. Sin embargo, esto debe estar unido a un plan que genere un mejor aprovechamiento de los recursos, y promueva un cambio de paradigma de los gobiernos, para que dejen de ver la inversión en salud como un gasto y la vean como una inversión a largo plazo que se traducirá en crecimiento socioeconómico.
La inversión en salud como potenciador de desarrollo de los países
WifOR Institute en su estudio “El estado de la Economía de la Salud en Costa Rica, Guatemala, Panamá y República Dominicana” analiza el papel importante de la Economía de la Salud en la región Latinoamericana, y señala cómo el sector de la salud contribuye a una mejor salud para la población, así como a la riqueza global de la sociedad.
En su estudio, Wifor destaca que estos países contribuyen entre un 7% y hasta un 10.5% del PIB, creando una huella económica de más de 50 mil millones de dólares; más que el PIB boliviano. Además, provee empleo al 10% de la fuerza laboral, generando alrededor de 2.2 millones de empleos en toda la región, que es mayor a la fuerza laboral de Uruguay.
Esto es un claro ejemplo del impacto que tiene la inversión en salud en el retorno a la sociedad y su impacto económico al evidenciar su aporte al PIB; pero principalmente en su contribución para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible, con miras a asegurar una vida saludable y fomentar el bienestar de todas las personas.
Sin embargo, los países de la región siguen teniendo desafíos por superar en materia de acceso y cobertura de los servicios de salud, así como en la inversión y ejecución del presupuesto. La cobertura de la población por parte del sistema de salud es un tema que en los países presenta diversas situaciones, ya que se tiene para el año 2020 una cobertura en Costa Rica del 92%, República Dominicana 71%, Panamá 63%, y Guatemala con sólo un 17% de la población.
Ejemplo de ello, es que la Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que el déficit de inversión en los países de ingresos bajos y medios para cumplir con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) orientados a la salud pública es cercano a los US$371 mil millones. Un menor presupuesto por país para el rubro sanitario representa un menor acceso de los ciudadanos a tratamientos innovadores, lo cual impacta directamente en su calidad de vida y amplía la brecha con los países desarrollados.
Por otra parte, la promoción del acceso a los servicios de salud tiene un gran potencial para elevar los niveles de ingresos, productividad, capital humano y la esperanza de vida. Existe una relación significativa entre las intervenciones en salud pública y los ingresos de los individuos, así como el efecto en el acceso a tratamientos médicos y en el aumento en la participación escolar.
Los beneficios que tienen las inversiones en salud en los niveles de escolaridad de los países permiten que los niños sanos se mantengan más tiempo en el sistema educativo, beneficiando su futuro en términos socioeconómicos. En general, se estima que la escolaridad puede aumentar hasta en 7 puntos porcentuales si se realizan intervenciones tempranas de salud.
Otro gran beneficio de las inversiones adecuadas en el sector salud es el hecho que la Economía de la Salud es un importante empleador, como demuestra el estudio, y tiene el potencial de crear más puestos de trabajo con mejores estrategias de inversión, fortalecimiento competitivo y generación de capacidades de producción tecnológicas, al asegurar un mercado amplio y estable
En lo que respecta al acceso a internet esencial para la implementación de la salud digital, los países tuvieron mejores resultados que el promedio en Latinoamérica y el Caribe con un 80.5% de acceso en Costa Rica y 76.9% en República Dominicana, mostrando oportunidades para las herramientas digitales de salud en estos países. Sin embargo, con 64.4% y 50%, Panamá y Guatemala resaltan la necesidad de inversiones adicionales para poder aprovechar plenamente las oportunidades ofrecidas por las soluciones sanitarias digitales.
Es así como el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) estimó que, con sistemas de atención en salud más eficientes, “la esperanza de vida en los países Latinoamericanos y del Caribe podría aumentar en cuatro años, en promedio”. Para esto, es fundamental apostar por las herramientas digitales para asegurar la eficiencia, ya que crean amplias oportunidades para mejorar el acceso a servicios médicos, así como a la calidad de atención y a la cobertura.
El presupuesto como herramienta estratégica
El “Estudio sobre inversión y presupuestos en Salud en Costa Rica, Guatemala, Panamá y República Dominicana” desarrollado por Sanigest International, evaluó las prácticas locales versus las buenas prácticas internacionales referidas a la gobernanza presupuestaria.
A raíz de esto, se logró visualizar que en los cuatro países analizados el gasto público en salud en el año 2021 osciló, en el caso Panamá y Costa Rica entre el 5% y 5,3% del PIB, respectivamente; mientras que República Dominicana y Guatemala requieren un esfuerzo adicional ya que invierten solo un 2,7% y un 2,4% del PIB, respectivamente. Según recomendaciones de organismos internacionales, el porcentaje del PIB que se invierta en salud pública debe como mínimo aumentar en la misma proporción que aumenta el PIB en los países, práctica que no se aplica.
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) recomienda que el gasto total en salud sea como mínimo del 9%, porcentaje que ningún país de Latinoamérica alcanza. En la región centroamericana, la inversión en salud pública es en promedio de un 3,8% del PIB, también por debajo del mínimo 6% del PIB recomendado por la OMS.
Por otro lado, entre las principales afectaciones que esto tiene en los sistemas de salud y en la calidad de vida de los pacientes ponemos mencionar: una atención primaria inadecuada e ineficiente, largas listas de espera, y mal manejo de la prevención y tratamiento de las enfermedades crónicas y raras, entre otras.
Por lo que no es de extrañar que, debido a las dificultades que presentan los pacientes de la región para acceder a los sistemas de salud, el gasto de bolsillo en el que incurren las familias de la región va en aumento en relación con el gasto total en salud. En el caso de Guatemala éste es de un 56%, siendo el más alto de región, seguido de República Dominicana con un 47%, Panamá con un 28% durante el periodo de 2017-2020; Costa Rica con un 20%. Estas cifras, a excepción de Costa Rica, sobrepasan el 20,6% recomendado por la OCDE.
A pesar de que los 4 países se desempeñan adecuadamente en materia de confiabilidad del presupuesto y transparencia de las finanzas públicas, sigue siendo un desafío asegurar la sostenibilidad de los sistemas de salud en el tiempo y la cobertura adecuada; lo que se puede lograr con una mejor administración de los recursos económicos.
Esto implica revisar los vicios presupuestarios de los sistemas de salud, como es el caso de las remuneraciones y transferencias corrientes que abarcan hasta un 77% del presupuesto de las instituciones públicas.
Además, las fuentes de financiamiento no han avanzado al ritmo de los cambios demográficos y epidemiológicos. Así lo demuestra la falta de liquidez de los servicios de salud, la duplicación de los procesos de compras, la morosidad y la informalidad laboral, las cuales son algunas de las áreas de atención identificadas en los cuatro países a lo largo del estudio.
Ante esto, Fedefarma en conjunto con Sanigest, proponen implementar mecanismos presupuestarios vinculados a logros cuantificables a corto y mediano plazo, que ayudarán a promover aún más la eficiencia y la efectividad del sector público. Aspecto que toma mayor relevancia en nuestra región debido a que los gobiernos suelen contar con recursos limitados que obligan a establecer estos mecanismos.
Soluciones colaborativas permitirán la modernización y sostenibilidad de los sistemas de salud de la región
El aporte de la Economía de la Salud al desarrollo de los países es notorio y destaca como un sector al que a lo largo de toda su cadena de valor genera ingresos, empleo y bienestar. Sin embargo, la experiencia internacional indica que un aumento en los recursos no necesariamente conduce a un mejor sistema de salud, en ausencia de herramientas para medir y mejorar los resultados. Así lo concluye el estudio de Sanigest.
Actualmente, los gastos en salud insuficientes e ineficientes son un problema grave que necesita ser abordado por las autoridades nacionales y los distintos sectores de la sociedad de los países de la región; y para contar con sistemas de salud más robustos y saludables financieramente es imperativo realizar un uso eficiente de los recursos y la agilización de trámites, así como adoptar modelos de compra que permitan el acceso a medicamentos y tratamientos de calidad e innovadores, entre otros aspectos.
Los datos de estos estudios son muy importantes para la toma de decisiones, y para la innovación en diferentes tecnologías que puedan mejorar la gestión sanitaria y la asignación de recursos para la Economía de la Salud.
Si los países desean cumplir con su compromiso con el Objetivo de Desarrollo 3 (Salud y Bienestar), se debe comprender que las inversiones en salud tienen un impacto en el desarrollo, a la par de su impacto económico, y desempeñan un papel decisivo para alcanzar los ODS.
Por este motivo, Fedefarma, ha compartido estos resultados con las autoridades de salud correspondientes, y se compromete a seguir trabajando en conjunto con ellas, para encontrar soluciones colaborativas e integrales que permitan la modernización y sostenibilidad de los sistemas de salud de la región.
Para Fedefarma, es fundamental que se establezcan de manera coherente y sistemática las prioridades ajustadas a las realidades actuales y perspectivas futuras de los países, logrando un uso efectivo de los recursos y manteniendo una inversión adecuada en salud pública, dentro de los parámetros recomendados por los organismos internacionales, lo cual permitirá garantizar la sostenibilidad de los sistemas de salud y una mejor calidad de vida para la población.