Alex Murillo I Nota de Prensa l redaccion@laesquina506.com
La Corporación Arrocera Nacional ha implementado el sistema conocido como Taipas con los productores arroceros de secano, con el fin de que sufran la menor afectación posible por el Fenómeno del Niño, mecanismo ya consolidado por los productores al demostrar su efecto positivo.
Las Taipas son pequeños lomillos que se construyen siguiendo curvas a nivel y que permiten contener como un muro y conducir el agua por todo el arrozal. Para lo cual se realiza un levantamiento topográfico con herramientas tecnológicas (Servicio brindado por CONARROZ) y posteriormente un tractor con un implemento que los conforma, es dirigido por un equipo satelital que ya tiene cargado el diseño de estas, logrando construir los muros en el terreno, fraccionándolo en pequeñas terrazas.
“Estas miniterrazas quedan a diferentes alturas, logrando que el suelo retenga humedad, sabemos que habrá disminución en las lluvias pero no sabemos con que frecuencia lloverá. Por ejemplo, un día podrá caer un aguacero, pero podrían pasar varios días secos, con este sistema se busca retener en el suelo esta humedad los 3 o 4 días que no llueva y se evitará que la planta se estrese, es decir, que la falta de agua en la planta no llegue a provocar daños fisiológicos y metabólicos”, explicó Lourdes Chavarría, directora de investigación de CONARROZ.
Para poner esta técnica en funcionamiento, ingenieros agrónomos de CONARROZ se han capacitado a lo largo de varios años y desarrollado habilidades operativas para su uso, adicionalmente la Corporación ha realizado inversiones en los implementos y la puesta en práctica de todo el sistema, se ofrece a los productores arroceros en forma gratuita.
Chavarría explicó que como parte de la labor de CONARROZ, desde principio de cada año se mantiene informados a los productores acerca de las condiciones del tiempo que se espera en cada región y como los puede afectar, estas charlas se dan en conjunto con el Instituto Meteorológico Nacional. Adicionalmente, CONARROZ ha venido haciendo ensayos para establecer momentos idóneos para las variedades de arroz por épocas de siembra. Porque el cambio se da cada año, y es importante que los productores sepan cual es la mejor época de siembra dependiendo de la variedad que utilizan.
“En este caso en que habrá condiciones de sequía los productores están usando variedades de ciclo corto, el proceso desde la siembra a la cosecha tarda normalmente de 90 a 120 días, con el ciclo reducido de 90 a 100 días, se baja el riesgo al mantener menos tiempo la planta en el campo”, agregó la experta.
Otras estrategias que CONARROZ recomienda a los arroceros poner en práctica son: utilizar fertilizantes menos volátiles como ciertas fuentes de nitrógeno, por ejemplo, y sustituirlas por fuentes que sean absorbidas más rápidamente por la planta. Otra medida es monitorear las poblaciones de gusanos y ácaros que ya están asociadas a las condiciones deficitarias de lluvia, así como enterrar las semillas y compactar el suelo al sembrarlas para su protección.
También, los estudios de CONARROZ pueden guiar a los productores sobre la conveniencia de atrasar o adelantar las fechas de la siembra, pero esto depende de cada región y el clima que esté pronosticado para ese sector.
El Instituto Meteorológico Nacional espera hasta julio para tener más certeza sobre el nivel de afectación que podría ocasionar el Fenómeno del Niño. “Aún está en una fase neutra, se está gestando, de manera que todavía no tenemos claridad sobre su intensidad, si será débil, moderado o fuerte”, dijo la meteoróloga Karina Hernández.
Aunque explicó que los pronósticos iniciales indican que no será tan fuerte como el que tuvimos hace 8 años, que inició desde el 2014 y se extendió hasta el 2016, provocando mucha afectación y por eso la gente lo recuerda. El que se está formando en esta ocasión se estima que se sentirá por completo a partir de julio y se mantendrá hasta finales de año.