
Ayer 24 de junio de 2025. La implementación de soluciones de Inteligencia Artificial (IA) y machine learning (ML) tienen un amplio potencial para mejorar la recaudación fiscal, pues sus análisis han demostrado que dichos recursos tecnológicos han ayudado a gobiernos a incrementar la recaudación hasta en un 5% en ingresos por auditorías y entre el 8% y 10% en los ingresos percibidos por recaudación.
Así lo destacan los expertos Yuri Rueda, Fraud Domain Expert de SAS México y Mario Ulloa, Experto en Gobierno en SAS México, basados en datos recopilados por la compañía, líder en datos e inteligencia artificial (IA).
“Algunos países estados que ya incluyen el uso de la analítica en sus procesos recaudatorios. Esto ha contribuido a que el pago de impuestos sea más asertivo, en comparación con los gobiernos en que no se usa. Esto significa que, a través de modelos analíticos, es posible detectar contribuyentes que no pagan, o que pagan menos de lo que les corresponde de acuerdo con sus ingresos, lo que los hace incurrir en la evasión fiscal”, aseguró Rueda.
Por su parte, Ulloa resalta que el uso de estos modelos aplicables de IA y ML, pueden incrementar la recaudación, en comparación con entidades en las que solo se llevan a cabo filtrados sencillos o superficiales y basados en open source, sin el uso de la analítica avanzada. Es de este modo que los auditores, en lugar de revisar por montos presentados, pueden hacer filtrados más específicos y profundos en los que sea posible identificar irregularidades entre lo presentado en las declaraciones, contra los ingresos reales.
En este sentido, los expertos de SAS, enfatizan que entre los recursos tecnológicos de IA, de los que pueden echar mano las instituciones públicas para hacer más eficiente la recaudación, incrementar la base de contribuyentes y transparentar sus declaraciones, así como trazar la ruta clara de los recursos recaudados en beneficio de los contribuyentes y el país entero, se ubican herramientas enfocadas en Tax Compliance para mejorar la recaudación de forma transparente y reducir delitos fiscales.
Por otra parte, los expertos de SAS también identifican soluciones enfocadas en la integridad de la gestión de recursos, conocidos como Procurement Integrity, los cuales permiten trazar una ruta clara y transparente del origen y destino de los fondos que se recaudan en los procesos fiscales, ello en aras de aumentar la honestidad en la gestión pública y evitar actos de corrupción o hasta malentendidos.
IA contra delitos fiscales
Otro de los puntos a resaltar son los delitos en materia fiscal que se han identificado en diversos países de la región, dentro de los que resaltan la evasión y elusión fiscal, fraude fiscal, entre otros.
Según de los expertos de SAS, el fraude fiscal es uno de los delitos económicos más graves en el mundo. Los gobiernos suelen incurrir entre el 10% y el 20% de los ingresos previstos, debido al incumplimiento y la evasión fiscal. Estas tasas se disparan hasta en un 70% en países tanto desarrollados como en vías de desarrollo.
Tanto Rueda como Ulloa resaltaron que con analítica madura es posible hacer agrupaciones de contribuyentes, lo que mejora la recaudación. Este tipo de tecnología permite procesar grandes volúmenes de información de fuentes tan diversas que van desde grandes contribuyentes de un país, hasta pequeños contribuyentes de zonas específicas. Ejemplos de gobiernos como el de Estados Unidos, Gran Bretaña y Chile, por mencionar algunos de los más avanzados en la materia, han sido casos en los que se utilizan actualmente estas herramientas, de acuerdo con SAS.
Los retos de la economía nacional
Debido a la turbulencia en materia comercial a nivel global, no pocos analistas prevén una recesión económica derivada de la disminución al consumo, la inflación y políticas fiscales, entre otros aspectos. A propósito de ello, los expertos de SAS vislumbran que precisamente uno de los elementos que podrían ayudar a amortizar los efectos de dicho fenómeno es precisamente hacer más eficiente la recaudación y el manejo de los recursos públicos.
“Al momento en que se presenta una recesión económica, hay menos consumo y en consecuencia menos impuestos que se paguen por ese consumo. Empieza a haber despidos y por tanto menores impuestos que se recaudan. Hay menos dinero y menos impuestos. Todo se convierte en una bola de nieve que afecta la recaudación”, aseguró Ulloa.
El experto afirma también que en contextos como este es en los que resulta mayormente beneficioso aplicar herramientas analíticas para hacer más eficiente la recaudación, al tiempo que enfatiza que se vuelve más crítico hacer una recaudación eficiente. Y ello no necesariamente radica en cobrar más a unos pocos, sino recaudar mejor donde siga habiendo fuentes de ingresos y ubicar de forma más certera los delitos o fraudes fiscales que puedan entorpecer la recaudación, concluyó.