Alex Murillo I Nota de Prensa l redaccion@laesquina506.com
Los niños en etapa de crecimiento requieren de una alimentación balanceada que aporte los nutrientes, las vitaminas y los minerales necesarios para el sano desarrollo. Una alimentación adecuada ayuda a evitar deficiencias o excesos que pueden provocar condiciones delicadas o enfermedades a largo plazo.
Según la Organización Mundial de la Salud, una inadecuada nutrición es uno de los principales factores de riesgo de mala salud a lo largo de la vida. Entre los efectos a largo plazo se encuentran las alteraciones del desarrollo intelectual y social, así como diversas enfermedades crónicas.
Por eso, los expertos recomiendan incluir en la dieta de los niños alimentos complementarios especializados para cada etapa de crecimiento que proporcionen esos nutrientes que ayudan al crecimiento sano, según la edad.
En el mercado hay disponible gran variedad de alimentos complementarios. Lo ideal es asesorarse con un profesional en salud para identificar las necesidades del niño y asegurarse que el producto ofrezca un adecuado aporte de proteína y esté fortificado con vitaminas y minerales.
Asimismo, es importante que contenga probióticos y prebióticos para ayudar a proteger el sistema inmune y minimizar el riesgo de enfermedades respiratorias.
“En Centroamérica hay un alto déficit de micro y macronutrientes en las edades de crecimiento. Uno de los más comunes es el déficit de hierro, que está relacionado con la anemia, y que en algunos países supera el 50% de niños afectados. También, es importante que los pequeños consuman cantidades adecuadas de proteína para no saturar los riñones y evitar que sean propensos a desarrollar enfermedades metabólicas”, comentó Juan Carlos Durán, representante de Nestlé Nutrition para Costa Rica.
Principales retos
Durante la etapa de crecimiento, principalmente en las edades entre 1 y 5 años, los niños tienden a ser más selectivos con los alimentos que consumen. Cuando esto sucede, es muy común que prefieran el consumo de carbohidratos y eviten las frutas, verduras y proteínas.
Por eso, es vital que los padres se informen sobre la importancia de la nutrición especializada, para brindar a los niños los beneficios de una alimentación completa y saludable para ayudar al crecimiento sano y, al mismo tiempo, ayudar a proteger el sistema inmune de los pequeños.
Otra recomendación importante es variar las recetas y alimentos en la dieta, de manera que los niños experimenten diferentes sabores, colores y texturas. Esto puede estimular su deseo de consumir alimentos saludables.
“Es clave entender que los niños tienen necesidades nutricionales diferentes a las de los adultos, por eso, la alimentación especializada es clave para complementar y dar variedad a la dieta de los pequeños, en cada etapa de vida, de manera que se logre cubrir sus requerimientos nutricionales”, agregó Patricia Vial, especialista en Nutrición, Salud y Bienestar de Nestlé Centroamérica.
Necesidades nutricionales
Preste atención a la siguiente lista que muestra las necesidades nutricionales de cada etapa:
- De 1 a 3 años: comienzan a descubrir el mundo y, constantemente, se llevan objetos a la boca. Para ellos es de gran ayuda el consumo de prebióticos y probióticos que ayudan a reducir las infecciones gastrointestinales.
- De 3 a 5 años: se lleva a cabo el desarrollo cognitivo de una manera muy rápida y aprende a hablar. En esta etapa, es crucial el consumo de hierro y calcio para que el cerebro se desarrolle correctamente.
- A partir de los 5 años: el niño se vuelve independiente y necesita consumir más calcio para ayudar al crecimiento y fortalecimiento de sus huesos, de manera que pueda disfrutar de sus aventuras.
“Es recomendable que los padres consulten con su pediatra sobre la necesidad nutricional de cada niño. La alimentación en edades tempranas tiene un impacto importante no solo en la infancia, sino que posteriormente en la etapa adulta”, concluyó Vial.
El sistema nutricional NIDO está diseñado especialmente para complementar la alimentación en cada etapa de crecimiento. Se recomienda el consumo de dos vasos diarios de 8 onzas en cualquiera de las etapas: NIDO 1+, NIDO 1+ Deslactosada, NIDO 3+ y NIDO 5+.
