• Las mujeres ahorran un 9% menos que los hombres, aunque en su mayoría se mantienen al frente del hogar.
• Entre los impactos positivos del ahorro femenino se encuentran el acceso a la educación y generación de empleo.

San José, octubre de 2025. Aunque las mujeres de nuestro país hoy son más activas económicamente, pues participan en el mercado laboral, lideran empresas y sostienen una proporción creciente de los hogares; la independencia financiera sigue siendo un reto creciente para ellas. Solo tres de cada diez mujeres logran mantener un ahorro constante, lo que refleja la vulnerabilidad económica que aún enfrentan. Datos del Banco Central de Costa Rica (2024).
Además, en promedio, las mujeres ahorran un 9 % menos que los hombres, a pesar de que son ellas quienes gestionan la mayoría de los presupuestos familiares, según el Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe (2023).
Grupo Mutual tiene una posible explicación para este fenómeno: “las mujeres son administradoras naturales de los recursos del hogar, pero muchas veces priorizan las necesidades de su familia sobre sus propias metas”, explica Rebeca Fernández, ejecutiva de Educación Financiera del conglomerado.
Mujeres que ahorran, economías que prosperan
El efecto del ahorro femenino trasciende las finanzas personales. En el plano familiar, se estima que los hogares donde las mujeres administran el presupuesto destinan hasta un 70 % de los ingresos a educación, salud y bienestar, fortaleciendo la movilidad social y la resiliencia económica de sus familiares.
A nivel empresarial, la contribución es igual de significativa. Según la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (2024), cada mujer que inicia o consolida un emprendimiento genera en promedio 2,3 empleos adicionales, ya sea por contrataciones directas o por la demanda de servicios asociados. ¿Y qué hace
posible este impacto?: el ahorro. Seis de cada diez emprendedoras utilizan ahorros propios como capital inicial, lo que convierte al ahorro en un motor directo de empleo y desarrollo local.
¿Cómo planificar metas financieras efectivas?
De acuerdo con los especialistas, el primer paso para fortalecer el hábito del ahorro es definir metas concretas y alcanzables en distintos plazos. Fernández recomienda dividir los objetivos según su horizonte:
• Corto plazo: vacaciones, pago de deudas pequeñas, inscripción a cursos. • Mediano plazo: inversión inicial para vivienda, especialización profesional, capital para inicial un pequeño negocio.
• Largo plazo: retiro o jubilación, emprendimiento o patrimonio familiar.
“En Grupo Mutual entendemos que las mujeres modernas, activas en lo profesional, educativo y familiar, requieren soluciones ágiles y accesibles. Por eso contamos con herramientas digitales como los Sobres GM, que permiten dividir el dinero en metas dentro de una misma cuenta, o la Cuenta MultiAhorro, que posibilita abrir hasta diez subcuentas con montos y fechas definidas. Estas opciones facilitan la organización y fortalecen el hábito del ahorro”, señala Fernández
Más allá de las estadísticas, el mensaje es claro: fomentar el ahorro entre las mujeres no es solo una meta personal, sino una inversión social. En un contexto donde la independencia económica se asocia cada vez más con la seguridad, la estabilidad y la equidad de género, el ahorro femenino se perfila como una de las herramientas más poderosas para reducir las brechas existentes, promover liderazgo femenino y, como consecuencia, fortalecer el crecimiento nacional.
En Grupo Mutual puede encontrar el aliado financiero para impulsar su crecimiento tanto a nivel profesional como personal, por ello pone a disposición 40 sucursales en todo el país y su sitio web www.grupomutual.fi.cr o central telefónica 2437-1000