Alex Murillo I redaccion@laesquina506.com
La Fiesta de Negro se convirtió en el escenario perfecto para lucir sus más recientes diseños de trajes de baño para hombres y bañadores, cortesía de la marca costarricense St. Lucca Sports Wear. Este proyecto nació con la noble intención de apoyar a las madres solteras, jefas de hogar. La pandemia brindó la oportunidad ideal para dar inicio a esta iniciativa. Con una inversión modesta pero cargada de entusiasmo y creatividad, las prendas comenzaron a tomar forma e inició su producción en Cartago, diversificándose con el transcurso del tiempo.
Actualmente, la empresa no solo ofrece bañadores masculinos, sino también ropa deportiva tanto para hombres como para mujeres. Además, se especializa en la fabricación de tangas para fisicoculturismo, cumpliendo con las medidas y estándares establecidos por la Federación de Fisicoculturismo y Fitness de Costa Rica.
«Allan Rámirez, dueño de la marca, destaca: ‘La ropa de St. Lucca está diseñada pensando en todo tipo de cuerpos’. Por ello, en la pasarela se presentaron modelos con diversas contexturas físicas. El objetivo es normalizar que cualquier hombre, sin importar su orientación sexual, se sienta a gusto vistiendo ropa para la playa o la piscina, sin importar si está en forma, es alto, bajo o tiene unos kilitos de más».
Es importante subrayar que St. Lucca adquiere la materia prima en Costa Rica y, como se mencionó al principio, fabrica sus prendas en el país, contribuyendo así a la generación de empleo nacional. Rámirez se asegura de estar completamente involucrado en todo el proceso para garantizar la calidad y la satisfacción del cliente.
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