Comunicado de Prensa l LaEsquina506CR@gmail.com
La falsificación de productos es un flagelo para la sociedad y los medicamentos no escapan a esa realidad. Es por eso que el 8 de junio, con motivo del Día Mundial contra la Falsificación y la Piratería, es importante evidenciar los riesgos para la salud pública y la seguridad que implica el comercio y consumo de tratamientos médicos falsificados o de contrabando.
Los fármacos falsificados son aquellos que han sido alterados de diferentes formas, afectando su principio activo y por lo cual representan un peligro para la salud y la vida de las personas. Consumir estos productos agravará la condición de los pacientes dado que no se está atendiendo la enfermedad como corresponde.
Un fármaco falsificado puede contener ingredientes incorrectos, inactivos o contaminados, lo cual tiene efectos adversos en las personas o incluso provocar la muerte. El año anterior, el Centro para el control y prevención de enfermedades de Estados Unidos, alertó sobre el aumento en la disponibilidad de píldoras falsificadas y un incremento en el porcentaje de muertes con evidencia de uso de fármacos falsos.
Además de medicamentos de venta libre, también hay evidencia de manipulación en tratamientos con receta, dispositivos médicos o productos similares de forma ilegal. Hay casos en los que fármacos auténticos son robados de los establecimientos o las cadenas de transporte, perdiendo las condiciones adecuadas de temperatura y de almacenamiento para garantizar que no pierda efectividad. Las organizaciones del sector salud en conjunto con autoridades, realizan anualmente campañas y operaciones para identificar estos productos.
Atendiendo a esta realidad, Fedefarma recuerda a la población que debe estar atenta a los medicamentos que consume y tener en cuenta principios básicos para la compra, almacenamiento y desecho de medicamentos. Victoria Brenes, Directora Ejecutiva de Fedefarma, explica que “la falsificación y el comercio de medicamentos falsificados y de contrabando, sigue en aumento de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, por eso es necesario estar alerta para ayudar a combatir esta situación que afecta la salud pública y la economía de las personas. Hay señales que pueden indicar que un medicamento ha sido adulterado, falsificado o que no tiene licencia, por eso es mejor buscar puntos de venta que ofrezcan el adecuado almacenamiento y manipulación del fármaco”.
A continuación, se brindan pautas para prevenir y no participar en el comercio y consumo de medicamentos ilícitos o sin registro sanitario.
- Buscar puntos de venta formales y farmacias con licencias
- No comprar en la calle, en ventas ambulantes o por internet.
- Desconfiar de publicidad “milagrosa” o de prácticas de venta agresivas. Si tiene dudas, mejor no compre esos tratamientos.
- Revisar que el empaque esté bien cerrado y que tenga los sellos de seguridad íntegros.
- Sospechar si el precio es muy bajo comparado con otros puntos de venta
- Desechar los medicamentos vencidos o que no se utilicen en puntos de acopio autorizados
- Reportar a las autoridades cualquier sospecha de venta de medicamentos ilícitos